Trabajando el fondo con texturas y degradados.

La pintura acrílica es uno de los medios artísticos más accesibles, ya que ofrece oportunidades ilimitadas tanto para principiantes como para artistas más avanzados. La cantidad de aplicaciones de la pintura acrílica sobre lienzo hace que sea una forma ideal de explorar la práctica artística, ya que puede usarse para finos detalles, diseños abstractos y todo lo que haya en medio. La pintura acrílica tiene poco olor y se seca más rápido que los óleos y, al tener una base acuosa, puedes empezar a crear obras maestras sin que necesites mucho equipo especializado.

La pintura acrílica puede rebajarse con agua o con otra variedad de medios para que puedas probar emocionantes técnicas y efectos nuevos. También puedes usarla directamente del tubo, así que sé creativo con lo que quieres conseguir. También hay geles que al mezclarse con la pintura acrílica crean el efecto de cera fundida. Sal de la caja de pinturas normales y prueba algo completamente nuevo con lo que podrías descubrir habilidades y estéticas que te llevarán por un camino creativo totalmente nuevo. Si empiezas ahora a usar pintura acrílica sobre lienzo, echa un vistazo a nuestro tutorial sobre cómo pintar una piña roja. Así te familiarizarás con algunas de las técnicas más usadas para empezar en tu aventura con acrílicos.

Prepara tu lienzo

Elegir la base de tu creación es muy importante. Los lienzos son normalmente de lino o algodón. El lino es normalmente el tipo que prefieren los pintores profesionales, pero podrás obtener los mismos resultados si usas lienzos de algodón. Nuestros lienzos de algodón Reeves tienen una superficie más suave y uniforme, mientras que los de lino tendrán imperfecciones naturales, como bultitos o pequeños relieves. Si preparas el lienzo con una capa fina de imprimador de gesso antes de pintar, conseguirás una plataforma uniforme en la que empezar tu obra, y como la pintura no penetrará en el lienzo, los colores quedarán mucho más brillantes, igual que tu espíritu creativo.

Cuando hayas aplicado el imprimador al lienzo y esté preparado para la explosión creativa, piensa en si quieres añadir un fondo antes de empezar. El fondo es el color base que aplicas primero en el lienzo. El fondo puede ser instrumental a la hora de dar forma a la sensación y emociones de la obra, y además te aseguras de que no quedarán huecos vacíos de lienzo sin pintar.

Técnicas de pintura

Existen innumerables maneras de demostrar tu talento, desplegar tus alas artísticas y usar trucos en el lienzo para crear obras sorprendentes. Estas son algunas maneras para empezar a convertirte en el próximo Monet o Van Gogh.
Detalles

La pintura acrílica sobre lienzo puede abrir todo un mundo de detalles a los pintores que están más acostumbrados a otros medios. La flexibilidad del acrílico te permite crear detalles muy finos, de hecho, los cuadros fotorrealistas están hechos con pintura acrílica. La clave para conseguir finos detalles con la pintura está en usar un pincel delicado de gran calidad y añadir pequeños toques, como el brillo del ojo, las ondas en el agua, o el delicado polen de una flor. En resumen, los toques que harán que tu obra cobre vida.

Punteado y toques

Crea texturas hermosas en el lienzo usando un pincel para estarcir la pintura o una esponja para dar toques de pintura directamente en el soporte. De copas de árboles a nubes o nebulosas de gas interestelar, con estos efectos podrás crear cualquier cosa.

Pincel mojado

Si mojas el pincel o añades agua a la pintura acrílica podrás conseguir un efecto más acuoso de la pintura, pero recuerda que se secará muy rápido (y de forma permanente). El agua adicional te ayudará también a conseguir líneas más rectas, ya que la pintura fluirá mejor.

Pincel seco

Usar un pincel seco con pintura acrílica no diluida es la mejor opción si quieres conseguir colores increíblemente vivos con un efecto de movimiento y textura. Ten en cuenta que, como la pintura no tiene mucho movimiento por sí sola, las líneas rectas serán difíciles de trazar con esta técnica.

Espátula

Nada te hará sentirte más artista que agarrar una espátula para cortar, hacer capas y extender la pintura en el lienzo que elijas. Esta versátil herramienta no puede faltar a aquellos que desaten su creatividad con pintura acrílica y al óleo especialmente.

Salpicaduras

Deja salir al Jackson Pollock que llevas dentro con golpecitos, salpicaduras y gotas de pintura en el lienzo, usando la herramienta que más te apetezca. Este método abstracto puede tener resultados sorprendentes incluso en las escenas más tradicionales.

Acabado

¿Está realmente acabada una obra de arte? Es una pregunta que se han hecho los artistas durante siglos y que sin duda seguirá siendo algo que las mentes creativas discutirán sin parar. La pintura acrílica se presta a las capas, así que si te apetece retomar tu obra después de unas semanas, meses o incluso años, podrías añadir más pintura después de haber quitado el polvo, pelusas y grasa al cuadro.

Si sellas el lienzo con cola de PVA, por ejemplo, o Mod Podge con un barniz conseguirás que los colores sean más brillantes y evitarás que el polvo se pegue a la obra terminada.

Si planeas vender tu magnífica obra de arte, aplicar barniz le dará a la obra un acabado más profesional, lo que probablemente significaría que podrías pedir un precio más alto que el de una obra sin sellar.

Por otro lado…

Con una pintura sin barnizar podrás ir añadiendo cosas a lo largo de los años con el pequeño esfuerzo de una suave limpieza. Esto es ideal si estás trabajando el perfeccionismo personal y quieres capturar tus inclinaciones de artista a través de los años.

Si has creado una obra muy texturizada que tiene varias capas de pintura, la aplicación del barniz puede acumularse en los pliegues y grietas del trabajo. Este efecto podría aumentar el efecto general, pero también tiene el potencial de eliminar parte de la fluidez que puedes tratado de capturar.

La vida es una aventura y nuestro arte es una forma de documentarla. Sigue estos consejos o invéntate los tuyos propios; las únicas reglas son las que te impongas a ti mismo. Cúbrete con pintura, comienza tu obra maestra y luego comienza de nuevo con el fondo adecuado para el momento; deja volar tu inspiración con pintura acrílica sobre lienzo, que allí adonde te lleve será un lugar hermoso.